IZVESTIA. Hace unos días, los norteamericanos decidieron darle a Rusia una lección más. Pero castigaron a sí mismos. El Departamento de Estado de EE.UU. impuso sanciones a las entidades rusas Rosobornexport (Agencia Nacional Exportadora de Armas) y el holding aeronáutico Sukhoi por desarrollar éstas la cooperación con el Irán "malo".
Pero la paradoja de la situación estriba en que Sukhoi no sólo moderniza los cazas iraníes sino también ejecuta ambiciosos proyectos civiles junto con grandes corporaciones norteamericanas como Hamilton Sundstrand, Honeywell y Boeing.
Ya es la segunda "lección" norteamericana en las últimas semanas. La primera la dieron en la cumbre del G-8 en San Petersburgo, al prometer primero dar su consentimiento para el ingreso de Rusia en la OMC, pero luego volvieron a terquear.
¿Qué consecuencias traen semejantes "lecciones"? ¿Por qué los norteamericanos, de un lado, instan a Rusia a fomentar la economía de mercado y no cooperar con Estados dudosos y, de otro, imponen sanciones y ponen toda clase de trabas a las compañías rusas que pretenden salir al mercado mundial? ¿Será porque no les apetece ninguna de las variantes del desarrollo del comercio exterior ruso? ¿Porque el armamento estadounidense compite con el ruso en los mercados de los países emergentes?
A Rusia le resulta mucho más fácil tratar con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez (que no le cae bien a Washington) que con los altos cargos oficiales de EE.UU. Rusia tiene mercancía, Venezuela desea comprarla, sin que les hagan falta intermediarios algunos, sea la OMC o algunos otros. Lo mismo es válido respecto a Irán. El negocio es honesto y abierto. No vendemos ni planeamos vender ninguna clase de armas de destrucción masiva. Pero EE.UU. otra vez está descontento, amenazándole a Rusia con aplicar sanciones y reprochándola de abandonar los principios de la economía de mercado. Pero todo esto le importa un comino a Rosobornexport que vendía armas antes y seguirá haciéndolo en el futuro. No necesariamente con EE.UU. En los mercados de los países en vías de desarrollo la demanda de material bélico ruso no menguará, aun cuando Rusia no sea miembro de la OMC.
