La compañía petrolera ROSNEFT puede reprivatizarse dentro de unos 3 - 4 años. Lo manifestó, alegando una fuente del Kremlin, Marshall Goldman, subdirector del Centro de Estudios Rusos y Eurasiáticos de la Universidad de Harvard.
Según él, la reprivatización de la compañía constituiría un punto de viraje en la política de Rusia. Pero expertos rusos rehúsan hacer pronósticos concretos sobre el futuro de la compañía, que actualmente es propiedad del Estado.
En la oficina de prensa de ROSNEFT se niegan a comentar tales rumores, afirmando que el destino de la compañía está en manos de sus accionistas.
Expertos rusos no están de acuerdo con las conclusiones que hace Goldman. Según Dmitry Manguilev, analista del centro "Prospect", hoy día nada indica que ROSNEFT pueda reprivatizarse. Además, en su opinión, la reprivatización no cambiaría nada, pues el Estado seguiría controlando la compañía.
El director científico de la Escuela Superior de Economía, Evgeny Yasin, admite dos variantes de desarrollo de acontecimientos: primero, se mantendrá la línea de nacionalización, por lo que ROSNEFT seguirá siendo propiedad de Estado, gozando de las ventajas que ofrece tal estatuto; segundo, el Estado va a participar enérgicamente en el proceso de redistribución de la propiedad y relevo de dueños. Baste con recordar la historia de YUKOS. Es muy probable que al fin de cuentas los luchadores contra esa compañía lleguen a ser propietarios de ROSNEFT, dice Yasin.
