Rusal, Sual y la suiza Glencore pactaron la fusión. La nueva compañía bautizada como Aluminio Ruso llevará la voz cantante en el mercado mundial de aluminio y alúmina, dejando atrás a Alcan y Alcoa.
En los próximos cinco años Aluminio Ruso planea invertir 3-3,5 mil millones de dólares en el aumento de la producción.
"La alianza con Glencore permitirá a las rusas construir en el territorio nacional tantas plantas de aluminio cuantas sean necesarias por obligarse la compañía suiza a garantizar los suministros de alúmina -comenta el analista de Solid, Igor Nuzdin-. No obstante, tendrían que ofertar a sus clientes productos de aluminio de alta calidad, estrategia que promovió en su tiempo Alcoa."
A juicio del experto, el nuevo holding podría fortalecer sus posiciones en el mercado de piezas para la industria aeronáutica por haberse negado las compañías europeas a suministrar repuestos a Airbus. "No se descarta que las compañías rusas ya hayan negociado suministros de aluminio al consorcio aeronáutico europeo -supone Nuzdin-. Pero para alcanzar el objetivo propuesto tendrán que mejorar la calidad de sus productos y ampliar su surtido."
Últimamente, en Rusia el Estado está tomando bajo su control a las compañías estratégicas. Sin ningún género de dudas, el principal productor mundial de aluminio correrá la misma suerte, si bien aparentaría ser independiente, llegaron a la conclusión compartida los expertos.
