Ernesto J. Navarro
La victoria electoral del chavismo en las presidenciales venezolanas tan contundente, tan incuestionable, que los opositores se vieron forzados -ante la abrumadora realidad- a parar al candidato Manuel Rosales frente a los medios y "reconocer" el aplastante triunfo de Hugo Chávez. Ahora bien, ese gesto, normal en cualquier proceso democrático, es exaltado por los medios de comunicación como si se tratase de un hazaña olímpica y ahora, el ex candidato opositor se ha convertido (para los medios opositores más recalcitrantes) en una especie de prócer de la patria.
Sobre esto quiero hacerles una serie de apuntes para el debate...
1.- Para los canales de televisión de Caracas la noticia no es que Hugo Chávez fue reelecto con 7.161.637 votos, lo que representa 62,89% de una población electoral de casi 16 millones de votantes, sino que Rosales reconoció la derrota y ahora emerge como el paladín de la "hidalgía" nacional (en palabras del profesor Vladimir Acosta) Cuando ya se conocían los resultados, cerca de las 5 de la tarde, sólo la posición firme de Teodoro Petkoff, un ex guerrillero, miembro del comando de campaña opositor, impidió que se impusieran los disociados que no querían reconocer los resultados...
2.- Contra Chávez votaron 4.196.329 venezolanos. Contra Chávez, que quede claro. Pero esos no son votos de seguidores del candidato Manuel Rosales, son votos antichavistas... Es decir, que hubiesen votado hasta por cualquier persona que nombrasen candidato. El candidato era lo de menos, lo que les importa es sacar a Chávez, a como de lugar, del palacio presidencial.
3.- En todo caso, el saldo para el candidato opositor fue favorable, su partido (Un Nuevo Tiempo) pasó de ser una agrupación regional, a uno con representaciones en varios estados del país. Pero deben estar conscientes de que no se construye una oposición en 3 meses y menos una cuyo único elemento en común es su odio irracional a Chávez. Oposición no es gente que sólo le sirve al candidato para tomarse fotos... Si quieren construir una oposición, les sale calle, debate, construir una propuesta, no en los hoteles de las zonas ricas de Caracas, sino con la gente y asumir -para comenzar- que son la minoría.
4.- La cacareada "conciliación" que se ha convertido en el nuevo tema de la oposición a Hugo Chávez, es una trampa. Los perdedores de las elecciones presidenciales ahora intentan imponer condiciones con discursos de primera comunión. Vean esto: el ex candidato Manuel Rosales nombró una comisión de "alto nivel", como si fuese presidente, para estudiar el tema de la reforma constitucional que, recordemos, la anunció Chávez mismo día de su reelección, no para suavizarle las cosas a los opositores, sino para profundizar la ruta hacia el socialismo.
Ahora, quienes dieron el golpe de Estado (en abril de 2002), sabotearon a la industria petrolera (diciembre 2002 - enero 2003), abandonaron las elecciones parlamentarias (diciembre 2005) con intensiones de desestabilizar, se presentan como los buenos de la película, *los conciliadores*. Se trata de una estrategia que sólo busca calar en los sectores moderados del chavismo, aquellos que dentro del gobierno son partidarios de "negociar" con la derecha, que prefieren no hablar de socialismo "por ahora"... Por esa vía quieren colarse los derrotados electoralmente. De cualquier forma Hugo Chávez fue enfático aquella noche de lluvia del 3 de diciembre: "aquí no habrá otro pacto de punto fijo" (1).
5.- Dos días después de las elecciones, Manuel Rosales habló de reforma constitucional, de elecciones parlamentarias, de amnistía, de recortar el período presidencial, de aprobar la aplicación de segunda vuelta electoral, incluso sigue vendiendo el fraude indecoroso de la tarjeta de débito "Mi Negra"... es decir, que desea imponer la misma agenda que fue rechazada por la mayoría electoral, que fue derrotada como propuesta el 3 de diciembre por más de 7 millones de votos. El mundo al revés, las liebres corriendo tras los perros...
6.- La exaltación de la hidalgía del ex candidato opositor, no es más que una estratagema ya utilizada por las televisoras de Caracas, para disminuir el triunfo popular. Lo intentaron en las parlamentarias luego que la oposición se retiró del proceso y abundaron argumentos de que la abstención hacía ilegítima a la Asamblea Nacional. Repito, ya no hablan de la victoria de Chávez sino del "democrático" gesto de reconocer la derrota.
7.- Quiénes hablan de conciliar y exigen condiciones: Antonio Ledezma (ex dirigente de Acción Democrática) que no aportó nada en terminos de votos. William Ojeda (cabeza visible del partido Un Sólo Pueblo) cuyo aporte nacional en términos de votos fue de 0,31%... Dirigentes del partido La Causa Radical (sin ninguna representación de gobierno local, regional o parlamentaria) que obtuvo 0,23%, el partido Bandera Roja (compuesto por ex militantes de la iaquierda ahora convertidos en grupos de choque de la derecha reaccionaria) cyua votación en favor de Rosales fue de 0,16%... Los que deberían estar buscando "legalizar" sus partidos (lean la ley electoral), los que no obtuvieron ni un punto porcentual, son los que gritan como si tuviesen con que... .
Para lo que el pueblo venezolano llama "profundización de la revolución bolivariana", esta fulana conciliación es una trampa, que busca minar al gobierno desde adentro, con los tibios, esos llamados moderados y que únicamente entorpecen el avance del pueblo en su proceso de empoderamiento...
Todo el pueblo espera que la "profundización" comience por corregir los entuertos. El movimiento popular de Venezuela, que respaldó a Hugo Chávez, hizo silencio ante muchos errores que comete el gobierno con la conciencia de que el objetivo principal era ganar la presidencia de nuevo... todo el país espera ahora, la reacción del reelecto presidente... ya veremos. Por lo pronto dejo estas reflexiones...
(1) http://www.analitica.com/bitblio/venezuela/punto_fijo.asp
