El viceministro de Justicia, Vladimir Kolesnikov, propone prolongar el plazo del mandato presidencial. Alega que cuatro años no bastan para recorrer todo el país. A juicio de expertos, esa extravagante propuesta responde a las esperanzas de los siloviki, vocablo que designa a las personas dentro de los organismos de seguridad, fuerzas del orden y el departamento militar en Rusia.
Kolesnikov gusta de hacer declaraciones radicales. Afirma que la actual Constitución es obsoleta y por lo tanto 'se necesita aprobar una nueva Ley que tome en cuenta las realidades de hoy'. En cuanto a la mayor deficiencia de la Constitución vigente, es el plazo excesivamente corto del mandato presidencial, considera el viceministro.
El presidente del comité parlamentario para el desarrollo de la Constitución, Yuri Sharandin, ha comentado perplejo que todas las declaraciones de Kolesnikov contradicen la Constitución. "Son más bien declaraciones políticas", resumió el legislador.
El subdirector del Centro de Tecnologías Políticas, Alexei Makarkin, opina que las inesperadas declaraciones de Kolesnikov dan esperanza a ciertos círculos cercanos al Kremlin, principalmente a los siloviki.
"Los siloviki no tienen un candidato real y ello significa que cualquier sucesor de Putin podría vulnerarlos en el plano tanto político como económico, porque los siloviki también tienen determinados intereses económicos", revela Makarkin.
En su opinión, los siloviki son los que buscan prolongar el mandato de Putin. "Anhelan conservar el statu quo y aceptarían cualquier variante de alargar el mandato presidencial", explicó.
"Por ahora no se puede excluir ninguna de las variantes, ni siquiera la de un tercer mandato aunque sería lo más extremo. En todo caso, el sucesor quedaría definido en el segundo semestre de 2007 o incluso a finales de año, y por eso aún queda tiempo para estudiar otras variantes", manifestó el politólogo.
