Moscú, 6 de junio, RIA Novosti. De casi 200 países, apenas 60 son realmente democráticos, y las democracias que aplican una política autónoma "pueden contarse con los dedos de una mano", opina Serguei Ivanov, vicepresidente primero del Gobierno ruso.
Son EEUU, la Unión Europea, India, Rusia, Brasil y República Sudafricana, dijo Ivanov al reunirse el miércoles con los representantes de varias organizaciones juveniles.
Las demás naciones democráticas, en su opinión, renunciaron voluntariamente a su independencia y delegaron una parte de su soberanía a Estados mayores.
"Rusia no podría permitirse lo mismo, por definición", afirmó él. "Tenemos un país grande, una mentalidad peculiar, y no podemos dejar de gastar en defensa", precisó Ivanov. De lo contrario, Rusia quedaría desmembrada, perdería a Siberia, al Cáucaso y a otros territorios, señaló él.
En general, Ivanov confesó que le gusta el término de la "democracia soberana", entendida como "democracia independiente, autónoma".
También observó que en lo relativo a los estándares democráticos "no conviene uniformarlo todo usando el rasero anglosajón".
