Moscú, 24 de septiembre, RIA Novosti. Un adolescente de Perm de 15 años, llamado Andrei, cubrió la distancia de 1.300 kilómetros escondido en el ala de un Boeing 737, ha informado este lunes la emisora de radio "Mayak".
Al aterrizar el avión en el aeropuerto capitalino de Vnúkovo, él cayó al asfalto, y lo encontraron en el campo fuertemente congelado: la temperatura en el ala era de - 50 grados Celsio, el vuelo duró 2 horas.
El chico fue internado. El incidente se produjo el viernes. Efectivos de la policía se pusieron en contacto con sus padres, y éstos arribaron a la capital aquella misma noche.
Según médicos, el muchacho quedó con vida por un milagro.
Andrei quiso fugarse de la casa, porque a menudo se reñía con sus padres. La madre en el conflicto tomó la parte del esposo, justificando sus borracheras.
Hasta ahora no está claro cómo el chico logró penetrar en el ala. El servicio de seguridad del aeropuerto de Perm tiene problemas en relación con ese incidente. Mientras tanto el fugitivo está pasando tratamiento en una de las clínicas de Moscú.