El Centro de Control de Malasia precisó el lunes que numerosas viviendas están bajo las aguas, mientras que las principales carretera y líneas férreas del país se encuentran paralizadas.
Los estados más afectados por las inundaciones, que han desbordado los principales ríos, son Kelantan (nordeste), Pahang (centro) y Johor (sur), donde se reporta el mayor número de evacuados, que están siendo albergados en colegios, centros comunitarios y edificios públicos.
El Departamento de Meteorología del país asiático ha levantado el nivel de alerta a roja (el máximo) en Pahang (centro) y a naranja en Kelantan y Terengganu (noreste).
Asimismo, pronosticó intensas lluvias y tormentas con fuertes vientos en los estados de Penang y Kedah, también en el noroeste.
Las autoridades temen que las altas mareas previstas para el próximo viernes, agraven la situación en las zonas costeras.
El viceprimer ministro malasio, Najib Razak, informó que personal de la Policía y del Ejército se encuentran en alerta para asistir a los damnificados y actuar en caso de que se produzcan nuevas inundaciones.
El fenómeno climático del monzón, que se produce entre noviembre y febrero, causó el año pasado en Malasia pérdidas por valor de 343 millones de dólares.
