Londres, 28 de febrero, RIA Novosti. El Real Tribunal de la ciudad británica de Stafford ha condenado a 30 años de privación de libertad a Kate Night, de 28 años, quien envenenó a su marido con un anticongelante, esperando recibir del dueño de la empresa donde él trabajaba un considerable subsidio funerario.
Night obtendrá el derecho a solicitar indulto sólo dentro de 15 años, dictaminó el tribunal.
La mujer sabía que en el caso de morir su marido Lee, la fábrica de excavadoras JCB donde él trabajaba pagaría 130 mil libras esterlinas, y concibió en 2005 el plan de librarse del esposo, recibir dinero, pagar las deudas contraídas y vivir con comodidad un tiempo.
En el séptimo aniversario de las bodas, ella mezcló líquido tóxico con la comida y el vino. Pero la dosis de antifrís añadida no bastó para provocar el desenlace letal. El esposo, en vez de morir, estuvo en coma durante cuatro meses, y cuando volvió en sí, se averiguó que él no veía ni oía, tenía dañados los riñones y afectado el cerebro.
Kate había cometido otro error, al hablar de su plan a una vecina suya, la que actuó como una de los principales testigos en el proceso. La propia Kate negó su culpa. Pero los jurados del Real Tribunal de Stafford, tras sostener debates durante ocho horas, la reconocieron culpable.
