Pekín, 15 de marzo, RIA Novosti. Al menos diez personas murieron, y cerca de medio millar fueron evacuadas por la policía de China a consecuencia de los graves disturbios ocurridos ayer en la ciudad de Lhasa, en el Tibet, informó hoy la agencia oficial Xinhua.
"La mayoría de las víctimas son civiles y entre ellos no hay extranjeros", indicó un portavoz de la Oficina de Asuntos Exteriores de la Región Autónoma de Tíbet, citado por la agencia china.
Según el portavoz, los civiles perecieron a consecuencia de al menos 160 incendios de comercios, automóviles y una mezquita provocados por manifestantes en los desordenes más graves ocurridos en el Tíbet en los últimos veinte años.
Del lugar de los disturbios y los incendios la policía china evacuó al cerca de más de 600 personas entre ellos turistas de Japón y de otros países.
La emisora Radio Free Asia, financiada por Estados Unidos, informó de que la policía china había disparado contra los manifestantes, y según testigos citados por la emisora, el número de muertos puede ascender a un centenar.
Las protestas en Lhasa comenzaron el pasado 10 de marzo, con marchas de protestas organizadas por monjes budistas para conmemorar el 49 aniversario de la aplastada rebelión contra el gobierno chino en 1959 que concluyó con el exilio de al menos 100.000 tibetanos ente ellos, el líder espiritual budista Dalai Lama.
Según fuentes chinas, centenares de manifestantes incendiaron y saquearon comercios, autos y se enfrentaron contra la policía en varios lugares de la ciudad.
Quanba Puncog, presidente del gobierno tibetano negó que la policía hubiera disparado contra los manifestantes, y acusó a líder Dalai Lama y sus seguidoras de organizar los desórdenes en Lhasa para desestabilizar la situación en Tíbet.
