Moscú, 26 de mayo, RIA Novosti. La estrategia antidrogas del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, más que todo protege a los ciudadanos estadounidenses y no prevé una destrucción de cultivos de opio en Afganistán, afirmó hoy el jefe del Servicio Federal de Control de Drogas de Rusia, Víctor Ivanov.
En declaraciones a RIA Novosti, Ivanov explicó que analizó la estrategia de Obama con su homólogo estadounidense, Gil Kerlikowske, junto al que preside el grupo de trabajo en materia antidroga creado en el marco de la comisión Medvédev-Obama.
Según el funcionario, la estrategia pone énfasis en la prevención de la drogadicción, la lucha contra el narcotráfico y los programas de tratamiento y rehabilitación, medidas que son financiadas con fondos públicos.
Al mismo tiempo, se continúa con la protección de las fronteras y las actuaciones de la inteligencia en el extranjero, aunque la prevención y la reducción de la demanda acaparan una financiación mucho mayor, destacó.
En cuanto a la destrucción del opio afgano, es financiada en mayor medida a través de diversos programas.
Según el jefe del Servicio Antidrogas ruso, los campesinos afganos actualmente se dedican al cultivo de opio, ya que les supone menos trabajo y riesgos que cualquier cultivo agrario.
"El opio crece solo, sin riesgos de producción, y es demandado por las mafias. Puesto que la OTAN no prevé destruir las plantaciones, no hay riesgos de ningún tipo", opinó.
El funcionario advirtió que hasta que no se acabe con la producción de opio, Afganistán será escenario permanente de conflictos, por lo que insistió en que la lucha antidrogas en ese país asiático debe ser librada simultáneamente con la lucha contra los talibán.
A juicio de Ivanov, el foro internacional dedicado al tema, que el Comité Nacional Antidrogas de Rusia y la agencia RIA Novosti celebrarán el próximo mes de junio, marcará un importante hito en este sentido. Los participantes del evento deberán determinar medidas de derecho internacional para luchar contra la producción de opio en Afganistán.
La estrategia antidrogas de Obama prevé realizar en los próximos cinco años una serie de programas sociales con el objetivo de bajar el nivel de consumo de drogas. Asimismo, se prevé una ampliación de la cooperación con otros Estados, entre ellos Rusia, en la lucha antidrogas.
El próximo año, la realización del proyecto contará con una financiación de 15.500 millones de dólares.
