La policía de Rumania empleó la víspera gas lacrimógeno para disolver una protesta antigubernamental en que participaron más de mil personas en la capital del país, comunicaron hoy medios noticiosos.
Las protestas masivas contra los planes de las autoridades de recortar sustancialmente el presupuesto se desarrollan durante tres días seguidos en Rumania. El sábado pasado, los manifestantes bloquearon la circulación del transporte en unas calles centrales de Bucarest. Se negaron a ir a sus casas durante siete horas pese a las exigencias de la policía.
Los reunidos corearon consignas demandando la destitución del presidente del país Traian Basescu.
La policía empleó gas lacrimógeno para disolver a los manifestantes. Al menos diez personas recibieron heridas, incluidos cuatro agentes de orden público y un reportero de la cadena de televisión rumana Antena 3.
Las autoridades del país ya habían realizado anteriormente un programa de recortes de gastos. En 2010, redujeron el 25% los salarios de los funcionarios públicos y aumentaron unos impuestos.
