El presidente de Rusia, Vladímir Putin, promulgó hoy una ley que establece para coches de lujo una serie de coeficientes al alza a la hora de calcular el impuesto sobre medio de transporte.
La normativa fija un coeficiente multiplicador de entre 1,1 y 3 en función del precio (a partir de tres millones de rublos o 92.785$ al cambio actual) y la antigüedad de los coches.
De acuerdo con las leyes en vigor, las entidades territoriales que componen la Federación Rusa definen por cuenta propia la cuantía del impuesto base sobre vehículos.
En mayo de 2012, el viceministro de Finanzas ruso Serguéi Shatálov mencionó que el impuesto a coches de lujo se extendería a marcas como Bentley, Lamborghini, Ferrari, Maserati, Porsche, Aston Martin, Roll-Royce, Chevrolet Corvette, Mercedes clase S y BMV serie 7.