Más que retirar las tropas desde el territorio afgano, EEUU y la OTAN planean trasladarlas al norte de Afganistán y a las naciones del Asia Central para afianzarse en esta región por mucho tiempo, opina Alexander Kniázev, colaborador del Instituto de estudios orientales de la Academia de Ciencias de Rusia.
“Kabul y Washington negocian la instalación permanente de bases militares de EEUU en Afganistán”, señaló Kniázev en unas declaraciones que recoge hoy Nezavisimaya Gazeta. Las tropas estadounidenses y, en parte, las de la OTAN planean retirarse del sur de Afganistán preservando únicamente varias bases clave: en Shindand, cerca de la frontera con Irán; en Kabul, para mantener la influencia sobre el Gobierno afgano; y en Kandahar, debido a su importancia estratégica.
“Las principales fuerzas terrestres se van a trasladar hacia el norte de Afganistán y a las repúblicas centroasiáticas, ante todo, Tayikistán y Kirguizistán”, declaró el experto, convencido de que “los americanos amplían en general su presencia en toda la región” y “han llegado (al Asia Central) por mucho tiempo”.
En Tayikistán, por ejemplo, “son bastante numerosos los casos en que destacamentos estadounidenses cruzan la frontera (desde Afganistán) en plan de trabajo” y en la localidad kirguís de Batken todo está listo para acoger la nueva base de EEUU. “Lo he visto con mis propios ojos, me consta que EEUU se va afianzando en el Asia Central”, dijo Kniázev.
Washington, a su juicio, procurará abrir nuevas instalaciones militares en la región y, tras ocupar posiciones clave, podrá contener perfectamente los intereses de tres grandes potencias: Rusia, Irán y China. Esta última, según Kniázev, es el objetivo principal de EEUU, por lo que el distrito tayiko de Murgab, limítrofe con China, se baraja como “lugar óptimo para albergar un punto de reconocimiento electrónico y asegurar la cobertura de un territorio bastante extenso”.
James Appathurai, emisario especial de la OTAN para el Cáucaso Sur y el Asia Central, llega hoy a la capital tayika, Dushanbé, en visita de dos días de duración que es la primera desde su nombramiento para el cargo, en diciembre de 2010. Appathurai ya visitó en mayo Kazajstán y Kirguizistán para asegurarse su apoyo a las fuerzas de la OTAN en Afganistán.
