Yuri Zaitsev, experto del Instituto de Investigaciones Espaciales (Academia de Ciencias de Rusia), para RIA Novosti. Los preparativos de la expedición interplanetaria rusa "Fobos-Grunt" (Fobos-terreno), han entrado en su fase final.
El lanzamiento de la estación está previsto para el otoño boreal de 2009. Precisamente en ese momento, la Tierra y Marte se encontrarán en su ubicación más favorable desde el punto de vista de la balística. Y a pesar de que todavía se estudia la lista definitiva de los instrumentos científicos que se instalarán en la estación, ya es conocido el plan general de la expedición.
Una vez cerca a Marte, el aparato espacial durante meses girará en torno al planeta en una órbita cercana a la órbita de Fobos para observarlo detalladamente. Esas observaciones, que serán prolongadas, permitirán precisar la forma del satélite marciano, establecer su masa, densidad, su campo gravitacional, y otros parámetros.
Posteriormente, el aparato se posará en Fobos y con ayuda de múltiples analizadores se realizarán investigaciones directas en su superficie. Los instrumentos permitirán escudriñar el interior del satélite marciano, con la ayuda, por ejemplo, de sismógrafos y sondas de radio.
La parte más importante de la misión será la recolección de muestras del suelo para traerlos a la Tierra. Si toda la misión se desarrolla de acuerdo a lo previsto, la cápsula con muestras del suelo de Fobos aterrizará en la Tierra entre el 15 de junio y el 20 de julio de 2012.
Se espera que serán muestras de aquel material primitivo a partir del cuál se formó todo el sistema solar. Una vez obtenido esa "proto-materia" se procederá a su análisis, lo que permitirá la posterior formulación de hipótesis relacionadas con su evolución.
La tarea de traer suelo de Fobos a la Tierra es una misión excepcionalmente compleja y arriesgada, y por esta razón, como medida de prevención los científicos decidieron comenzar su estudio ya durante el viaje de regreso con instrumentos analizadores a bordo.
Con este fin, especialistas de Instituto Politécnico de Hong-Kong elaboraron un instrumento especial que preparará el suelo para su análisis.
La cooperación de los científicos chinos en la expedición es más amplia, pues simultáneamente a la estación interplanetaria rusa, un cohete portador enviará a Marte un aparato espacial chino de 100-130 kilogramos para desarrollar investigaciones en órbitas próximas al Planeta Rojo.
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDIRÁ OBLIGATORIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI
