La central nuclear de Bushehr, en el sur de Irán, sigue trabajando con normalidad a pesar del terremoto que se produjo esta tarde a unos 90 kilómetros de la planta, informaron las autoridades iraníes y varias fuentes rusas.
El gobernador de Bushehr, Fereydoun Hassanvand, aseguró en televisión iraní que en la planta “no se han registrado daños algunos”.
Un portavoz de Atomstroyexport, la empresa que completó la construcción de Bushehr, dijo anteriormente que el seísmo se sintió en la planta pero no afectó su trabajo.
También un portavoz de la embajada rusa en Teherán afirmó que no hay destrucciones en la central. “Tampoco ha habido cortes algunos. La planta sigue generando energía eléctrica dentro de la normalidad”, agregó.
El epicentro del terremoto cuya magnitud alcanzó 6,1 grados se encontraba a una profundidad de 10 kilómetros cerca de la ciudad de Kaki, a unos 90 kilómetros de la central de Bushehr. A la primera sacudida siguieron varias réplicas, la más fuerte con una magnitud de 5,4 grados. Según los datos preliminares, el terremoto causó al menos 20 muertos y unos 500 heridos.
