EEUU respaldará a los países del Asia Central y el Caspio en los intentos de encontrar nuevas rutas para la exportación de sus hidrocarburos al mercado internacional, afirmó el pasado jueves Richard Morningstar, emisario del Departamento de Estado de EEUU para el sector energético de Eurasia.
“Queremos ayudar a las naciones de la región del Caspio y el Asia Central a hallar nuevas rutas hacia los mercados mundiales de recursos energéticos. Les deseamos prosperidad económica. Una vez que hayan ampliado su potencial de exportación, podrán mejorar la competitividad de sus recursos, exigir un precio equitativo por aquéllos e integrarse cabalmente en la economía global”, manifestó Morningstar en una reunión del subcomité de asuntos europeos y euroasiáticos del Comité internacional de la Cámara de Representantes.
El emisario reafirmó la adhesión de Washington al principio de la diversificación de flujos energéticos y reiteró el apoyo al llamado Corredor Energético del Sur que podría transportar el gas del Caspio, mayoritariamente, de origen azerbaiyano, hacia Europa a través del territorio de Turquía.
Hacia octubre próximo, Azerbaiyán planea escoger entre el proyecto Nabucco y las rutas alternativas para el trasiego de su gas al mercado europeo. El gasoducto Nabucco se tendería al margen de Rusia, a través de Azerbaiyán, Georgia, Turquía, Bulgaria, Hungría, Rumania y Austria. Su construcción, según los datos más recientes, podría empezar en 2013 y el primer suministro comercial tendría lugar en 2017. La capacidad anual del gasoducto Nabucco se calcula en 31.000 millones de metros cúbicos, o un 5% del volumen del gas que la Unión Europea necesitaría en 2020.
