Rusia puso en marcha hoy la primera línea del gasoducto Sajalín-Jabárovsk-Vladivostok (SJV) que va a facilitar en el futuro la exportación de su gas a los países del Asia Pacífico.
El primer ministro ruso Vladímir Putin, quien asistió a la ceremonia del lanzamiento, subrayó que “el desarrollo de las infraestructuras en (…) el Lejano Oriente dista mucho del final” y que el próximo año empezará la construcción de otra tubería de gas en Yakutia, para incrementar la fidelidad del sistema energético de la región.
El proyecto SJV es una de las obras prioritarias del llamado Programa Oriental que el coloso gasista de Rusia, Gazprom, viene implementando por encargo del Gobierno federal. Además de mejorar el suministro del gas a la población del Lejano Oriente de Rusia, el nuevo conducto facilitará la exportación del gas ruso a los países del Asia Pacífico.
El gasoducto SJV, que va a proporcionar combustible a ocho plantas locales de energía eléctrica, se extiende a más de 1.800 Km. Su primera línea podrá transportar seis mil millones de metros cúbicos al año, capacidad que se va a quintuplicar en un futuro.
