El presidente de la mayor petrolera rusa Rosneft, Ígor Sechin, considera posible triplicar las ventas de crudo a China.
“En el momento actual los suministros se ubican en 15 millones de toneladas al año y la cifra de 50 millones no es algo inalcanzable, pues se trata de un mercado prioritario, existe la infraestructura correspondiente y otras vías de suministros”, dijo hoy Sechin a la televisión rusa.
Al recordar que la petrolera rusa tiene firmado con China un contrato de suministros para un plazo de 20 años, el directivo aseveró que Rosneft dispone de reservas de crudo suficientes tanto para realizar las entregas acordadas como para aumentarlas.
Sechin agregó que la compañía rusa también construirá una refinería en Tianjin, ciudad costera de China. “Hace días se acordó que el proyecto en cuestión tendrá un componente petroquímico lo que permitirá alcanzar el necesario nivel de rentabilidad”, dijo.
La construcción de la refinería de Tianjin, con capacidad de procesar 13 millones de toneladas de petróleo al año, requerirá de una inversión de 5.000 millones de dólares. La futura planta podrá exportar los derivados de petróleo y venderlos en el mercado interno, derecho que se otorga por primera vez a una empresa con la participación extranjera.
Actualmente, Rosneft y la estatal rusa Transneft por el oleoducto Siberia Oriental-Océano Pacífico (SOOP) entregan anualmente a China 15 millones de toneladas de petróleo, y reiteradamente, Pekín ha expresado el interés de aumentar sus importaciones de crudo ruso.
Según una fuente de la industria rusa de petróleo, para aumentar notablemente las exportaciones la crudo a China, Rosneft estudia la variante de trasegar crudo ruso por el territorio de Kazajstán utilizando el oleoducto Atasu-Alashankou.
