La crisis de poder que atraviesa Costa de Marfil tras las elecciones presidenciales empeoró después de que los dos ganadores autoproclamados de los comicios formaran sus respectivos Gobiernos, informaron agencias internacionales.
La víspera, Alassane Ouattara, líder opositor y rival del mandatario actual, Laurent Gbagbo, en las presidenciales, anunció la formación del nuevo Gobierno y reafirmó en el cargo al primer ministro Guillaume Soro.
Tan sólo unas horas después, Gbagbo declaró que también formará su propio Gabinete. Anteriormente, ambos rivales celebraron sus respectivas ceremonias de investidura presidencial.
El pasado 28 de noviembre, el país africano celebró la segunda vuelta de las presidenciales. Según la autoridad electoral, Laurent Gbagbo obtuvo el 45,9% de votos, mientras que Alassane Ouattara reunió el 54,1% de sufragios.
No obstante, el Consejo Constitucional anuló los resultados de la votación en siete departamentos al norte de Costa de Marfil, asegurando de esta forma la victoria electoral al presidente actual. La decisión del Consejo Constitucional provocó enfrentamientos entre los seguidores de Ouattara y las fuerzas de seguridad que acabaron con dos muertos en las calles de Abiyán.
Pese al empeoramiento de la crisis, las autoridades militares marfileñas reabrieron este lunes las fronteras terrestres, aéreas y marítimas que permanecieron cerradas desde el pasado jueves.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, expresó su apoyo a Ouattara y pidió a Gbagbo que le transfiera el poder de forma pacífica. Sin embargo, el Cosejo de Seguridad no logró una decisión unánime respecto a las elecciones del país africano.
Por su parte, el Banco Mundial y el Banco Africano de Desarrollo emitieron hoy una declaración conjunta en la que condicionaron la concesión de ayudas a Costa de Marfil a la resolución de la crisis política.
Las anteriores presidenciales en Costa de Marfil, país que proclamó su independencia de Francia en 1960, se celebraron en 2000 dando como ganador a Gbagbo. Los nuevos comicios fueron aplazados en seis ocasiones.
Con una población de más de 21 millones de habitantes, Costa de Marfil es una república presidencialista en la que el jefe de Estado se elige mediante votación directa, por un mandato de cinco años y con derecho a una única reelección.
