El Parlamento de Bulgaria adoptó hoy una resolución que recomienda al presidente Georgi Parvanov cesar a 35 embajadores que durante el régimen comunista fueron agentes del Comité de Seguridad de Estado, o KDS, por sus siglas en búlgaro, comunicó hoy Radio Bulgaria.
El documento fue aprobado por 152 votos a favor y 33 en contra.
El ministro búlgaro de Asuntos Exteriores y uno de los promotores de esta moción, Nikolay Mladenov, calificó anteriormente de “inadmisible” la permanencia de estos diplomáticos en sus cargos actuales. Reconoció en diciembre pasado que antiguos colaboradores de la policía secreta encabezan hoy un 40% de las 114 legaciones diplomáticas de Bulgaria en el extranjero, en particular, las embajadas en Ámsterdam, Atenas, Berlín, Copenhague, Lisboa, Madrid, Moscú, Pekín, Roma y Tokio.
El primer ministro búlgaro, Boiko Borisov, también se pronunció por el cese de estos diplomáticos. La oposición, entretanto, afirmó que es una votación “vergonzosa” porque introduce el principio de responsabilidad colectiva cuando lo correcto sería examinar cada caso por separado.
Los primeros ficheros confidenciales del KDS fueron desvelados en 1997 y desde entonces trascendió a la luz pública la identidad de miles de funcionarios e informantes de Seguridad. La legislación búlgara en vigor no prevé sanciones algunas contra los ex agentes secretos.