Al menos 20 personas murieron y casi 100 resultaron heridas a consecuencia de nuevos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y manifestantes opositores en la ciudad de Taiz, en el sur de Yemen, informaron fuentes médicas locales, citadas hoy por agencias.
Además, otras 200 personas quedaron afectadas por los gases lacrimógenos que emplearon los agentes de las fuerzas del orden para dispersar la protesta en Taiz, mientras los fallecidos perdieron la vida a raíz de los disparos de armas de fuego.
Al mismo tiempo, cuatro militares yemeníes murieron y decenas recibieron heridas en una emboscada de militantes de Al Qaeda a un kilómetro de Zinyibar, capital de la provincia de Abyan, en el sur del país árabe.
Según fuentes del Ejército, los militares, incluido un coronel de las Fuerzas Armadas de Yemen, se dirigían a una ciudad controlada por insurgentes en el estado de Abyan, cuando fueron sorprendidos por radicales islámicos.
El pasado 27 de marzo, unos 200 hombres armados tomaron varios edificios públicos en la ciudad de Zinyibar, que pasó bajo el control de grupos armados.
De acuerdo a los testigos, en enfrentamientos que se registran en la región desde el pasado viernes, ya fallecieron al menos 17 militares y un civil.
Tras conocerse la información sobre la perdida de Zinyibar por el Ejército, la oposición yemení acusó al presidente Ali Abdalá Saleh de usar la amenaza de Al Qaeda para obtener el apoyo de potencias regionales.
Las protestas antigubernamentales en Yemen no cesan desde el febrero pasado. Los manifestantes exigen la renuncia del presidente Ali Abdalá Saleh que está al frente del país desde 1978.
