Las autoridades egipcias rechazaron en términos categóricos las recientes acusaciones por parte del Gobierno israelí de que el insuficiente control sobre la seguridad en Sinaí hizo posible la infiltración de miembros de Al Qaeda en esta península situada al sur de Israel.
El jefe del servicio de seguridad egipcio Hamed Abdallah, citado hoy por la agencia noticiosa Mena, afirmó que “no hay militantes de Al Qaeda en el territorio de Egipto” y calificó de “infundada” las noticias sobre la supuesta presencia de miembros de esa organización terrorista en Sinaí.
Abdallah subrayó que su entidad “coopera con agencias locales, regionales e internacionales para proteger la seguridad nacional, combatir el terrorismo internacional y la delincuencia transfronteriza”.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu cuestionó el pasado lunes la capacidad de Egipto para “ejercer su soberanía en Sinaí” y afirmó que organizaciones del terrorismo global incrementan su presencia en esa península debido a la conexión entre el Sinaí y la Franja de Gaza.
En los últimos meses se registraron en Sinaí dos ataques contra la red de tuberías que trasiega el gas egipcio a Israel y Jordania. El suministro del hidrocarburo a Israel se mantiene en suspenso desde el pasado 27 de abril, fecha en que tuvo lugar el segundo de esos actos subversivos.
Además, se multiplican últimamente en Sinaí las protestas de tribus beduinas que cortan las principales autopistas de la península para conseguir el cumplimiento de sus demandas.
Un alto cargo de seguridad citado por la prensa egipcia afirmó hace poco a título anónimo que en Sinaí fueron detectados más de 400 terroristas de Al Qaeda.
