El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, declaró que el reconocimiento del Estado palestino por la Asamblea General de la ONU obstaculizará la reanudación del diálogo árabe-israelí.
“En caso de que ocurra, será realmente difícil aceptar compromisos inevitables durante el proceso negociador”, dijo Netanyahu al reunirse la noche del pasado martes con el presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, citado por su consejero Alex Selski.
El primer ministro israelí destacó que apoya el principio de dos Estados para dos pueblos, mientras que los palestinos “todavía no tienen la disposición de reconocer el carácter judío de Israel”.
“Antes de septiembre tenemos que hacerlo todo para que el máximo posible de países declaren: no reconocemos la proclamación unilateral de Palestina”, dijo Netanyahu al agregar que según estima, de 30 a 50 países rechazarán la proclamación unilateral del Estado palestino.
Anteriormente, los líderes palestinos anunciaron su intención de solicitar a la ONU el reconocimiento de su Estado en el caso de que las negociaciones con Israel sigan estancadas.
A finales de marzo de 2011 el jefe de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, declaró que aspira a la creación del Estado palestino el próximo mes de septiembre.
Los palestinos aspiran a crear un Estado palestino con las fronteras del año 1967, incluidos los territorios de Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén Este. Israel rechaza retirar sus tropas de los territorios ocupados por razones de seguridad y la situación demográfica actual.
A principios de septiembre los mediadores extranjeros lograron reiniciar contactos directos entre las partes, que fueron suspendidos unas semanas después, al expirar la moratoria de diez meses sobre la construcción de asentamientos judíos en Cisjordania y Jerusalén Este.
Los palestinos vincularon su posterior participación en el proceso negociador con la condición de que Israel suspenda la ampliación de los asentamientos.
La reconciliación entre las principales fracciones políticas, Al Fatah y Hamas, podría representar otro obstáculo para la reanudación de las negociaciones, ya que Israel se negó a tener contactos con cualquier autoridad apoyada por islamistas de Hamas.
El pasado mayo el presidente estadounidense, Barack Obama, declaró que la extensión del futuro Estado palestino debe delimitarse a partir de las fronteras de 1967.
Los participantes del “cuarteto” (Rusia, Unión Europea, ONU, EEUU) apoyaron la iniciativa, no obstante Netanyahu rechazó tal posibilidad al indicar que la vuelta a las fronteras de 1967 hará “indefendible” a Israel.
