El gobierno de Turquía se opone a cualquier intervención militar en Siria, declaró hoy el ministro de Relaciones Exteriores turco, Ahmed Davutoglu.
"No queremos recurrir a una intervención militar en los asuntos internos de Siria, pero tampoco aceptamos las operaciones militares de ese gobierno contra la población civil», señaló el ministro.
La prensa árabe informó que el ministro de Defensa turco Ismet Yilmaz negó que Turquía planee crear una zona de interposición en la frontera con Siria debido al creciente flujo de refugiados provenientes de ese país.
Según datos oficiales recientes, el número de refugiados sirios se redujo de 17 mil a siete mil debido a la relativa estabilización de la situación en algunas partes de Siria.
Antes el Ministerio turco de Asuntos Exteriores exigió al presidente sirio, Bashar Assad, el cese inmediato de todas las operaciones militares contra la población civil, sin condiciones previas, y pidió a Damasco iniciar la reforma política.
Las protestas en Siria comenzaron a mediados de marzo pasado en la localidad de Dera'a en el sur del país, después se extendieron a otras regiones.
Activistas de derechos humanos de Siria, denunciaron que hasta la fecha en los enfrentamientos de manifestantes con las fuerzas de seguridad del país, dos mil personas perdieron la vida.
El gobierno sirio por su parte reveló la muerte de casi 500 soldados y miembros de las fuerzas de seguridad en acciones
de "elementos armados terroristas", culpables de la violencia en el país.
