Rusia insiste en que el Consejo de Seguridad de la ONU auspicie el proceso del arreglo en la era post Gadafi, declaró hoy Alexandr Lukashévich, portavoz del Ministerio ruso de Asuntos Exteriores.
Lukashévich se pronunció por que la Secretaría de las Naciones Unidas “siga planificando la modalidad de su presencia” en Libia pero resaltó la necesidad de actuar con “extrema cautela” en esa materia.
Aún es prematuro, según él, dar por terminado el conflicto en Libia porque las noticias que van llegando de allí son muy encontradas. “Estaremos dispuestos a debatir en términos concretos las recomendaciones y las ideas del secretario general de la ONU cuando nos hayamos convencido de que la situación en Libia no implica una amenaza directa a la vida de representantes de las Naciones Unidas”, dijo.
A la pregunta de si Rusia va a participar en la conferencia del llamado grupo de “amigos de Libia” que el presidente francés Nicolas Sarkozy planea celebrar en París el próximo 1 de septiembre, Lukashévich dijo que “no hemos recibido una invitación”. “Es la ONU y su Consejo de Seguridad, no el llamado grupo de contacto y demás cuasi estructuras, los que deben tener protagonismo en el arreglo político del conflicto libio”, destacó.
Según la prensa francesa, China, Rusia e India serán invitadas a esa conferencia.
Los rebeldes que desde febrero pasado luchan contra el régimen de Muamar Gadafi entraron en Trípoli en la noche del 20 al 21 de agosto y, según sus afirmaciones, controlan buena parte de la ciudad, incluida la zona de edificios gubernamentales de Bab al Aziziya. Por ahora se desconoce el paradero del coronel Gadafi, quien gobernó Libia durante más de 40 años. Según diversas estimaciones, el conflicto ya costó la vida a miles de libios, incluidos más de 400 que, según los rebeldes, murieron en tres días de batalla de Trípoli.
