El derrocado líder libio Muamar Gadafi intentó negociar con las autoridades argelinas el estatuto de refugiado político en Argelia, pero su petición fue rechazada, informaron fuentes próximas a la administración del presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, citadas por el diario Al Watan.
“Gadafi intentó contactar por teléfono con el presidente Buteflika, quien se negó a conversar”, dijo la fuente al agregar que el asesor presidencial alegó que el líder argelino estaba ocupado de asuntos internos.
Asimismo, la fuente resaltó que “Argelia tiene una postura neutral y no quiere inmiscuirse en los asuntos internos de Libia”.
El pasado lunes la esposa de Gadafi Safia y sus tres hijos Aisha, Anibal y Muhamed entraron en Argelia. Las autoridades argelinas resaltaron que dejaron entrar al país a familiares de Gadafi por razones humanitarias y tomando en consideración que no se les presentaron ningunas acusaciones.
Mientras tanto, el secretario de Relaciones Internacionales del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), Jacinto Suárez, descartó que Gadafi se asile Nicaragua, Bolivia o Venezuela, al calificar estos rumores de una “serie de disparates” y una “campaña mediática”.
El dirigente sandinista aseguró que el líder libio optará por morir en la patria que vivir en un país ajeno.
En una entrevista al sitio el 19digital Suarez declaró que las potencias occidentales están creando “un gobierno fantoche, que legalice en primer lugar las barbaridades que está haciendo la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) allí y en segundo lugar que entregue lo último que queda del patrimonio petrolero libio a las compañías europeas y norteamericanas”.
En los años 1970 Libia concedió asilo a los líderes de sandinistas nicaragüenses que huyeron de la dictadura de Anastasio Somoza.
