Las autoridades cubanas calificaron de difamador la víspera al exgobernador del Estado estadounidense de Nuevo México, Bill Richardson, que arribó a Cuba para discutir el caso de su compatriota Alan Gross.
Al llegar a la isla la semana pasada, Richardson dijo a los periodistas que fue invitado por las autoridades cubanas para examinar el caso de Alan Gross, un estadounidense de 62 años, condenado en Cuba a 15 años de prisión por los “crímenes contra la independencia y la integridad territorial del país”. Señaló que no se irá de Cuba antes de ver a Gross.
Pero el martes pasado declaró que abandona Cuba muy decepcionado por haber recibido la negativa definitiva a su solicitud de reunirse con el preso estadounidense. También añadió que esa negativa es un indicador de que las autoridades cubanas no quieren mejorar relaciones con EEUU.
La directora del Departamento de América del Norte del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Josefina Vidal Ferreiro, al comentarlo indicó que Richardson arribó a La Habana por su propia iniciativa. Señaló que la excarcelación de Gross nunca figuró en la agenda de la visita, lo cual se había dicho a Richardson durante su preparación.
La reunión con el recluido se hizo imposible tras las declaraciones difamatorias a la prensa, en las que Richardson definió a Gross como “rehén” del Gobierno cubano, dijo Vidal. Hicimos recordar al señor Richardson que Cuba es un Estado soberano que no admite chantaje, presión y abuso de facultades, recalcó.
Añadió que el estado de salud de Gross es normal, correspondiente a su edad y dolencias crónicas y que el 9 de septiembre lo visitaron unos representantes del servicio consular de EEUU.
Del fallo del tribunal cubano se desprende que Gross introdujo ilegalmente en territorio de Cuba unos medios de comunicación para crear redes internas como parte de un programa de EEUU apuntado a apoyar las acciones que desestabilizan el país y minan su régimen constitucional.
EEUU a su vez afirma que Gross no hizo más que dar acceso a Internet a unas organizaciones judías locales y que no cometió ningunos delitos. Anteriormente, la esposa de Gross apeló a las autoridades cubanas solicitando liberarlo por consideraciones humanitarias.
La Habana tacha de difamador al exgobernador estadounidense Richardson
18:00 GMT 15.09.2011 (actualizado: 16:23 GMT 01.02.2017)
Síguenos en
Las autoridades cubanas calificaron de difamador la víspera al exgobernador del estado estadounidense de Nuevo México, Bill Richardson, que arribó a Cuba para discutir el caso de su compatriota Alan Gross.
