El ministro de Exteriores de Francia, Alain Juppé, advirtió este domingo que una intervención militar en el conflicto entre Occidente e Irán en torno al programa nuclear de la República Islámica llevaría a una desestabilización total en Oriente Próximo.
En lugar de una injerencia militar, Francia aboga por recrudecer las sanciones contra Teherán, declaró el canciller galo a la emisora Europe 1.
“Todavía podemos ampliar las sanciones para presionar a Irán, y tenemos la intención de seguir este escenario, porque una intervención militar podría provocar una desestabilización total en la región”, explicó Juppé.
Los líderes de EEUU y Francia advirtieron esta semana que continuarán presionando a Teherán para que cumpla los compromisos internacionales relativos a su programa nuclear.
EEUU y algunos países de Occidente acusan a Irán de desarrollar armamento nuclear bajo la cobertura de su programa civil de energía atómica. Teherán rechaza las acusaciones y asegura que su programa busca sólo satisfacer la demanda interna de energía.
El Grupo de los Seis mediadores internacionales para el problema nuclear iraní, formado por los miembros permanentes de la ONU (Rusia, China, EEUU, Francia y Reino Unido) y Alemania, exige a Irán detener los trabajos de enriquecimiento de uranio porque amenazan el régimen de no proliferación nuclear.