Todos los países de la Unión Europea, salvo Gran Bretaña, manifestaron hoy el deseo de participar en un nuevo “pacto fiscal” de la zona euro durante la cumbre del Consejo Europeo que se celebra en Bruselas.
La declaración final adoptada al término de la reunión deja constancia de que Bulgaria, República Checa, Dinamarca, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumanía y Suecia tienen la intención de adherirse al nuevo tratado de austeridad presupuestaria tras consultarlo con sus respectivos Parlamentos.
De esta manera, la lista de signatarios del nuevo Tratado de la UE podría incluir a 26 países: 17 de la zona euro y otros nueve que están fuera pero forman parte de la UE. Todos, menos los británicos.
El nuevo “pacto fiscal”, según la declaración aprobada en Bruselas, apunta a recrudecer el control sobre la deuda pública e implica la necesidad de mantener los presupuestos con superávit o equilibrados.
El déficit estructural anual no podrá exceder un 0,5% del PIB nominal y cada país refrendará esta “regla del equilibrio” en la Constitución o al nivel equivalente. Cuando un país de la zona euro incurra en un déficit superior al 3%, estará sujeto a sanciones automáticas a menos que a ello se oponga la mayoría cualificada de sus socios.
Las bolsas europeas que iniciaron la jornada de hoy en rojo acogieron la noticia con subidas del 0,7-2,5% hacia las 13.00 GMT. La moneda europea se apreció en un 0,32% frente a la estadounidense, hasta 1,3383 dólares por un euro en comparación con 1,3341 dólares la víspera.
