Rusia confía en que la Unión Europea (UE) se abstenga de posible intervención militar en el conflicto de Siria, a pesar de que algunos de los países comunitarios se precipitan a la hora de sacar conclusiones tras la matanza de civiles en la localidad siria de Hula, declaró el embajador ruso ante la UE, Vladímir Chizhov.
“Quisiera creer de todo corazón que los líderes europeos, así como de otros países, tendrán la suficiente sangre fría y capacidad de evaluación sobria como para no ir por el peligroso camino de la escalada de tensión y, peor aún, de una intervención militar”, señaló el diplomático durante una videoconferencia entre Moscú y Bruselas organizada por RIA Novosti.
Según Chizhov, la postura de Rusia se basa en el apoyo al plan del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, que no contempla intervención externa alguna, sino apuesta por el aumento del esfuerzo diplomático para lograr el fin de la violencia y el diálogo político nacional.
Hasta la fecha, la UE nunca ha abogado por la una solución militar a la crisis siria, recordó el embajador ruso, al tiempo que denunció que algunos de los países europeos y occidentales intentan sacar conclusiones políticas precipitadas tras la matanza de Hula que causó al menos cien muertos, muchos de ellos niños, y varios centenares de heridos.
“Observamos que desde ciertas capitales, incluidas algunas europeas, ya se hacen conclusiones políticas y, me temo, también organizacionales, que van demasiado lejos”, afirmó.
En este sentido, criticó la expulsiones de los embajadores sirios de varios países europeos como un “gesto de propaganda que no favorece la realización del plan de Annan ni la resolución” de la crisis siria.
Muchos países europeos piden a Rusia presionar a Damasco, mientras que la presión occidental sobra la oposición siria continúa insuficiente, lamentó.
“Observamos intentos de hacer favores a los opositores sirios y envíos de armamento para ellos”, denunció el diplomático.
El embajador ruso ante la UE recalcó que sólo “informes de los observadores de la ONU deben ser el factor determinante para las valoraciones políticas” y que únicamente el Consejo de Seguridad de la ONU es un “espacio para poder debatir posibles correcciones al plan de Annan”.
A mediados del pasado mes de abril y conforme al plan de Annan, se decretó en Siria un alto el fuego supervisado por la misión de observación de la ONU en el país árabe. Sin embargo, ambas partes del conflicto reportan periódicamente nuevos enfrentamientos armados y víctimas mortales.
