Rusia se pronunció hoy por reanudar la labor de observadores internacionales en Siria, siempre y cuando se garantice su seguridad.
“Consideramos sumamente necesario reanudar el trabajo normal de observadores de la ONU, lógicamente, a condición de que haya plenas garantías de su seguridad personal”, declaró el portavoz del Ministerio ruso de Asuntos Exteriores, Alexandr Lukashévich.
Agregó que “tanto el Gobierno de Siria como la oposición armada deben tomar medidas correspondientes para que colaboradores de la UNSMIS (Misión de Supervisión de Naciones Unidas en Siria) tengan acceso libre y seguro a diversas zonas del país, en particular, para controlar objetivamente la observancia del alto el fuego y contribuir al fomento del diálogo sobre el terreno”.
El general noruego Robert Mood, jefe de la UNSMIS, anunció el pasado 16 de junio que los observadores internacionales suspenden su labor “hasta ulterior aviso” debido a la escalada de violencia en Siria.
Los enfrentamientos armados entre la oposición y el régimen de Bashar Asad en Siria causaron más de 9.000 muertos desde marzo de 2011, según la estimación de la ONU.
