Rusia presentó ante el Consejo de Seguridad de la ONU un proyecto de resolución sobre Siria que prevé ampliar por tres meses el mandato de la misión de los observadores de las Naciones Unidas en el país árabe.
“No es un proyecto confrontacional. Su principal objetivo es apoyar los esfuerzos de Kofi Annan y los acuerdos alcanzados en Ginebra durante la reunión del Grupo de Acción”, dijo el embajador adjunto de Rusia ante la ONU, Alexander Pankin.
La semana pasada, el secretario general de la ONU Ban Ki-moon propuso al Consejo de Seguridad varios escenarios del futuro de la misión de observadores en Siria, incluida la reducción de militares y el aumento de observadores civiles.
Según Pankin, “Rusia está dispuesta a aceptar las propuestas del secretario general de la ONU respecto al funcionamiento de la misión”.
“Invitamos a todos nuestros socios a trabajar en equipo sobre nuestro proyecto, aunque somos conscientes de que puede no convencer a todos, puesto que estos días hay muchas conversaciones sobre sanciones como la única opción para obligar a Damasco a cumplir sus compromisos, incluidas sanciones que afectan los intereses de Rusia”, señaló el funcionario.
La delegación rusa confía en que la votación del proyecto sobre la ampliación del mandato de los observadores internacionales en Siria propuesto por Moscú tendrá lugar antes del 20 de julio.
“Si no logramos ponernos de acuerdo, enfrentaremos el peor escenario, es decir la retirada de los observadores de la ONU desde Siria”, advirtió.
Siria es desde hace más de un año escenario de violentos enfrentamientos armados entre la oposición y los partidarios del presidente Asad, que causaron más de 12.000 muertos, según estimaciones de la ONU.
Las autoridades sirias, a su vez, afirman que más de 2.500 militares y policías murieron abatidos por grupos ilegales fuertemente armados.
