El presidente de EEUU, Barack Obama, ordenó hoy reforzar la protección de las embajadas estadounidenses a lo largo del mundo tras la muerte del embajador Christopher Stevens y otros tres diplomáticos en un ataque contra el consulado de EEUU en la ciudad libia de Bengasi.
“He ordenado a mi Administración que proporcione todos los recursos necesarios para avalar la seguridad de nuestro personal en Libia y para incrementar la seguridad de nuestras legaciones diplomáticas a lo largo del mundo”, declaró Obama esta mañana.
Condenó en términos categóricos el ataque que costó la vida el martes a cuatro ciudadanos estadounidenses, incluido el embajador Stevens quien apoyaba, según Obama, “la transición de Libia a la democracia”.
La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, también censuró el ataque. Recordó que Stevens llevaba 21 años en el servicio diplomático. Hace unos meses se puso al frente de la embajada en Libia y se convirtió en el primer funcionario estadounidense que llegó a Bengasi tras la caída del régimen de Muamar Gadafi en 2011.
Un portavoz del Gobierno libio citado por Reuters precisó que el embajador Stevens y otros tres diplomáticos estadounidenses murieron en un ataque con proyectiles contra la sede del consulado en Bengasi. Según los datos preliminares, una granada estalló contra el coche en que se encontraban los cuatro diplomáticos.
Varias horas antes del incidente, miles de personas rodearon la legación estadounidense coreando consignas antiamericanas y quemaron una bandera de barras y estrellas protestando contra el estreno en EEUU de la película “La inocencia de los musulmanes”, que supuestamente difama al profeta Mahoma.
El presidente del Parlamento libio, Mohammed al Megaryef, pidió disculpas a EEUU y a toda la comunidad internacional a través de la cadena de televisión Al Yazira.
También dijo a la prensa que “el Gobierno de transición ha hecho cuanto podía para proteger las embajadas, los consulados y las empresas extranjeras en Libia”.
El primer ministro libio, Abdurrahim al Keib, aseguró que el Gabinete extremará las medidas de seguridad en respuesta a los ataques.
Un cargo militar estadounidense citado por AFP dijo hoy que los marines ya enviaron a Libia un comando FAST, por las siglas en inglés de Fleet Antiterrorism Security Team (Equipo de Seguridad Antiterrorista de la Flota). Se trata de unos 50 efectivos, precisó.
