El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confía en que podrá conseguir un acuerdo con Irán sobre su programa nuclear en enero próximo, declaró hoy el negociador principal del OIEA para Irán, Herman Nackaerts.
“Acordamos celebrar la próxima reunión el 16 de enero del año entrante, en la que esperamos concluir la coordinación del convenio (sobre el problema nuclear de Irán) e inmediatamente después empezar a aplicarlo”, dijo el negociador citado por AFP.
Las partes celebraron la víspera en Teherán una nueva ronda de negociaciones, declarando a su cierre que era “constructiva y positiva” y que fue logrado “un sustancial progreso”.
Sin embargo los expertos del OIEA no pudieron cumplir su plan de visitar la base iraní de Parchín, donde en agosto pasado se observaron grandes movimientos de tierra.
En relación con eso surgieron suposiciones de que los iraníes estaban sacando tierra y demoliendo unas edificaciones allí para ocultar las huellas de unos experimentos nucleares.
El OIEA expresó la esperanza de que la próxima vez la parte iraní dé acceso a sus expertos a esa base.
Teherán afirma que Parchín no tiene nada que ver con el programa nuclear, que es una base militar, y como tal no figura entre los objetos que inspecciona el OIEA.
El Organismo Internacional de Energía Atómica, junto con el “sexteto” integrado por representantes de Rusia, Gran Bretaña, China, EEUU, Francia y Alemania, viene insistiendo desde 2003 en que Irán suspenda las obras de enriquecimiento del uranio, que pueden peligrar el régimen de no proliferación nuclear.
EEUU, otros países occidentales e Israel sospechan que Irán esté desarrollando arma nuclear bajo la cobertura de su programa nuclear civil. Teherán lo niega rotundamente. Afirma que realiza ese programa con el fin de satisfacer la demanda energética del país.
