El exministro chino de Ferrocarriles, Liu Zhijun, acusado de malversaciones y abuso de poder fue condenado este lunes a muerte con suspensión de pena por dos años, comunicó la agencia Xinhua.
Según la práctica judicial de China, la sentencia de muerte puede ser sustituida por cadena perpetua si el recluido muestra un buen comportamiento durante esos dos años.
El tribunal también ordenó la confiscación de todos los bienes y haberes de Liu Zhijun y le privó de los derechos políticos de por vida.
Durante el proceso fue probado que el hombre se aprovechó entre 1986 y 2011 de sus puestos de alto funcionario de Ferrocarriles y ayudó a 11 personas a obtener ascensos y contratos, recibiendo de ellos en sobornos 64,6 millones de yuanes (más de 10 millones de dólares).
El juez, al pronunciar el fallo, dijo que el exministro hizo un colosal daño económico al Estado.
La legislación china prevé castigar con pena capital los delitos de corrupción a partir de 100.000 yuanes.