Los senadores Richard Durbin y Dianne Feinstein pidieron al presidente de EEUU, Barack Obama, eliminar la práctica de nutrición forzosa de los presos de Guantánamo que se declaran en huelga.
“Los reclusos declaran huelgas de hambre porque desde más de una década viven una situación legal indefinida y ya han perdido toda esperanza”, escribieron los legisladores en una carta enviada a nombre de Obama, instándole a cesar la nutrición forzosa por ser humillante.
Un tribunal de Washington se negó a satisfacer esta semana la demanda de un preso de Guantánamo que pidió que dejaran de alimentarlo por la fuerza. El juez indicó que solamente el presidente del país como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas está facultado para prohibir al personal de Guantánamo nutrir a los reclusos por la fuerza.
Los senadores pidieron a Obama ordenar al Departamento de Defensa que cese tal práctica, y si la huelga de hambre peligra la vida del preso, tomar las medidas de precaución necesarias para que no sea un proceso doloroso y humillante.
Numerosos presos de Guantánamo se declararon en huelga de hambre en febrero pasado. Hoy siguen en huelga 106 personas, a 44 de ellas alimentan forzosamente con unos líquidos nutritivos.
El centro de detención fue establecido en Guantánamo, isla de Cuba, en 2001 para albergar a sospechosos de terrorismo después de los ataques de Al Qaeda a Estados Unidos y el comienzo de la guerra de Afganistán
Actualmente, allí se mantienen 166 personas.
