El canciller ruso Serguéi Lavrov declaró que son inconsistentes los datos sobre el uso de armas químicas en Siria que Rusia había recibido de EEUU.
“Nos mostraron ciertos extractos totalmente exentos de detalles concretos, ya sean coordenadas geográficas, nombres o pruebas de que habían sido los profesionales los que recogieron las muestras. Tampoco se comenta que numerosos expertos cuestionan la autenticidad de los vídeos que hay en internet”, declaró Lavrov hoy al intervenir ante estudiantes y el claustro del Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú.
Según el canciller ruso, países de Occidente rehúsan presentar pruebas concretas argumentando que son datos clasificados.
“Lo que nos mostraron anterior y recientemente nuestros socios estadounidenses, así como los franceses y los británicos, no nos convence en absoluto. No nos dan hechos, sino dicen que lo saben a ciencia cierta. Y si les pedimos confirmarlo, aducen que son datos clasificados que no pueden revelar. Entonces, resulta que no hay ningún hecho”, apuntó el titular de Exteriores.
Ayer, el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, declaró que Washington tiene pruebas del uso de gas sarín en el ataque perpetrado en las afueras de Damasco el pasado 21 de agosto. El viernes pasado, las autoridades de EEUU desclasificaron un informe de inteligencia que apunta al régimen sirio como responsable de aquel ataque que causó al menos 1.429 muertos.
La Casa Blanca presentó al Congreso un proyecto de documento en el que el presidente Barack Obama solicita autorización del Senado y de la Cámara de Representantes para emprender una acción militar contra Siria.
Obama había advertido anteriormente que el uso del arsenal químico sería una “línea roja” para el régimen sirio y haría que EEUU revisara su postura ante el conflicto en el país árabe.
