Los rusos proponen “cortar las manos” a funcionarios corruptos y aumentar los impuestos para las grandes empresas con el propósito de combatir el déficit presupuestario, según una encuesta publicada hoy en el portal RBKdaily.
Así, los encuestados contemplan además otras medidas de la lucha contra funcionarios corruptos, como “declararles enemigos del pueblo”, “meterlos en la cárcel” e incluso “ejecutarlos”.
Los ciudadanos que participaron en el sondeo consideran innecesario gastar fondos del Estado en la organización de Juegos Olímpicos y el cambio de nombre de la Policía, en el marco de reformas en el Ministerio ruso del Interior.
Asimismo, los rusos mostraron amplio apoyo a la idea de la subida de impuestos para las grandes empresas.
A los rusos no les irritan tanto los negocios, como sus propietarios. “Los ricos tienen que pagar más impuestos”, coincide la mayoría de los encuestados.
En cuanto a la percepción de los funcionarios en el pueblo, el 40% de los rusos cree que los empleados públicos “no hacen nada”, mientras que el 84% propone prescindir de muchos de ellos, hecho que se corresponde con la política del Gobierno actual.
El pasado septiembre, las autoridades rusas anunciaron que en los próximos tres años serán despedidos alrededor de 120.000 funcionarios, lo que supondrá un ahorro de 43.000 millones de rublos (1.500 millones de dólares).