La cooperación entre Rusia y China alcanzó un nivel sin precedentes en los ámbitos político y humanitario, mientras que en el terreno económico aún existen problemas, declaró hoy el primer ministro ruso, Vladímir Putin.
“En los ámbitos político y humanitario no hay ningún tipo de problemas. Hemos alcanzado un nivel realmente alto, sin precedentes, de interacción”, manifestó Putin al inaugurar en Pekín la 16º reunión de los primeros ministros de ambos países.
Al mismo tiempo, el jefe del Gobierno ruso reconoció que en el ámbito económico surgen numerosas dificultadas, que por otra parte son inevitables dado el “enorme volumen” de las relaciones bilaterales.
“Aquel que vende, quiere vender más caro, aquel que compra, quiere comprar más barato. Hemos logrado siempre llegar a un acuerdo satisfactorio para ambas partes”, indicó.
Por su parte, el primer ministro chino, Wen Jiabao, valoró muy positivamente las relaciones entre los dos países y expresó disposición para mejorarlas aún más.
“El Gobierno chino está dispuesto a redoblar sus esfuerzos para conseguir, junto con el Ejecutivo ruso, una cooperación estratégica multidimensional que se caracterice por la igualdad, la confianza, el apoyo mutuo, la prosperidad común y una amistad que se transmita de generación en generación”, señaló.
La reunión entre Vladímir Putin y Wen Jiabao con sus respectivas comitivas estuvo precedida por un encuentro “cara a cara”, así como un acto oficial de bienvenida al primer ministro ruso en el Gran Salón del Pueblo, en la Plaza de Tiananmen de Pekín.
En el vestíbulo del palacio, el mayor de este tipo en el mundo, fueron interpretados los himnos nacionales de ambos países. Acompañado por su homólogo chino, Putin pasó revista a la guardia de honor, cuyos efectivos vestían uniformes del Ejército de Tierra, la Fuerza Aérea y la Marina de Guerra.
