El 10 de octubre próximo, en Moscú se reunirán los titulares de las carteras de Asuntos Exteriores y de Defensa de Rusia y de EEUU para discutir la problemática de la defensa antimisiles (DAM). Es el principal resultado que arrojó el viaje de inspección efectuado ayer por la delegación ruso-norteamericana al radar de Gabala (Azerbaiyán).
La Administración de George Bush afirma que sus planes de emplazar radar en la República Checa y antimisiles en Polonia buscan proteger a los norteamericanos y europeos contra el ataque nuclear por parte de Irán y otros países gamberros. Pero a Moscú le preocupa el que el radar controle una buena parte del territorio ruso. En opinión de expertos militares rusos, el radar de Gabala que Rusia arrienda a Azerbaiyán sirve perfectamente para vigilar a los países problemáticos, a Irán, por ejemplo. En conjugación con el radar de Gabala podría funcionar otro radar ruso que se está construyendo en las afueras de la ciudad de Armavir (sur de Rusia).
De momento, EEUU no se propone renunciar a los planes de emplazar elementos de la DAM en Polonia y la República Checa y consideran el radar de Gabala como eventual parte integrante de éstos.
Alexandr Pikáev, colaborador del Instituto de Economía Mundial y Relaciones Internacionales (Academia de Ciencias de Rusia), expresó a Vremia Novostei: "Los planes de emplazar elementos de la DAM en Polonia y la República Checa topan con una fuerte resistencia por parte de varias naciones europeas, lo que obliga a Washington a cambiar de táctica. La Casa Blanca intenta mostrarle a la opinión pública europea que logra persuadir a los rusos de que la DAM no representa para ellos amenaza alguna".
El general mayor Pável Zolotariov, director adjunto del Instituto de EEUU y Canadá (Academia de Ciencias de Rusia), consignó que "últimamente, Europa empieza a enfocar desde una óptica más sensata los planes norteamericanos de emplazar la DAM en Polonia y la República Checa". Según el general, esto se debe no sólo a una reacción marcadamente negativa de Rusia, sino también a una apreciación objetiva de las amenazas provenientes de Irán. La operación militar contra Irán, a la que con cada vez mayor frecuencia se refiere Washington, destruiría el potencial misilístico de este país y, al mismo tiempo, eliminaría el motivo para emplazar elementos de la DAM en Europa del Este. Por lo tanto, "en una u otra medida, los mandatarios de los países europeos se dan cuenta de las verdaderas razones que mueven a EEUU a instalar la DAM en Europa", enfatizó a Vremia Novostei general mayor Pável Zolotariov.
En opinión del politólogo azerbaiyano Jikmet Gadzhizadé, "los norteamericanos instalan sus radares en Europa del Este para protegerse no de Irán sino de Rusia".
