Moscú, 8 de noviembre, RIA Novosti. Las acusaciones de que Rusia supuestamente tuvo que ver con las acciones de protesta que se desarrollaron en Tbilisi, formuladas por las autoridades georgianas, son una prueba de su agonía, sostienen senadores rusos.
El presidente del Consejo de la Federación de Rusia, Serguei Mirónov, las calificó como una absurdidad, así como dijo que son fundamentadas las exigencias que fueron planteadas por la oposición en Tbilisi. En particular, ésta exigía la dimisión del presidente y la celebración de las elecciones parlamentarias en abril de 2008.
"El pueblo de Georgia se siente cansado de que sus dirigentes están intentando resolver problemas ajenos, en vez de aquellos que preocupan a su propio pueblo", dijo Mirónov.
Vladímir Kulakov, miembro del Consejo de la Federación y jefe de la delegación permanente de la cámara alta del parlamento ruso en la Asamblea Parlamentaria de la OSCE, ha calificado las acusaciones en cuestión como un paso estúpido.
"Esas manifestaciones son un paso totalmente estúpido, pero predecible, tratándose del señor Saakashvili", manifestó Kulakov a RIA Novosti.
Al comentar dichas manifestaciones y también la decisión de declarar "persona non grata" a tres diplomáticos rusos tomada por la parte georgiana, Kulakov las calificó como una "agonía del poder en Georgia". "Tenemos un clásico ejemplo de cuando uno ya no sabe qué hacer, intenta cargar la responsabilidad sobre otros", dijo.
Kulakov también ha expresado la seguridad de que los acontecimientos en cuestión impactarán de modo negativo en la imagen que se tiene de Georgia en el exterior.
Al pronosticar el desarrollo de la situación, el senador supuso que se puede esperar la dimisión del presidente de Georgia ya en los próximos días. "Los días del señor Saakashvili están contados", dijo.
A su vez el miembro del Consejo de la Federación, Vasili Duma, señaló: No se justificaron las promesas de Saakashvili de que Georgia viviría mejor sin Rusia, por ello no le queda otro remedio que buscar a un enemigo exterior.
"Al conocer bien el carácter de Saakashvili, se puede expresar la seguridad de que él no hará concesiones ni se sentará a la mesa de negociaciones, sino que seguirá aplicando su línea hasta el final", dijo Duma.
Según él, las autoridades georgianas deberían tener presente la experiencia histórica: apenas Georgia establecía buenas relaciones con Rusia, mejoraba su situación política y económica.
Vasili Duma no comparte la opinión de que a Georgia la espere una guerra civil. "Tras la introducción del estado de emergencia, la situación se tranquilizará un poco", cree él.
El miércoles en Tbilisi se produjeron choques de los manifestantes con la policía. Ésta empleó mangueras, gas lacrimógeno y balas de goma. El presidente Saakashvili introdujo el estado de emergencia por 15 días (lo tiene que aprobar el parlamento del país), que supone la introducción de limitaciones provisionales sobre la celebración de manifestaciones y mitines y el funcionamiento de los medios noticiosos.
