Pekín, 15 de marzo, RIA Novosti. Las autoridades chinas fijaron hoy un "plazo de entrega a la policía" a los organizadores y participantes de los violentos desórdenes ocurridos ayer en la ciudad de Lhasa, los más graves en las últimas dos décadas.
"Las autoridades del Tíbet exigen a los infractores entregarse a la policía antes de la media noche del lunes y prometen que serán tratados con indulgencia", indicó en un comunicado la agencia oficial china Xinhua.
Según reportajes difundidos por la prensa internacional, centenares de manifestantes atacaron ayer oficinas del gobierno, saquearon e incendiaron comercios, vehículos y lanzaron piedras contra la policía.
China acusó al líder espiritual Dalai Lama y sus seguidores de organizar los desordenes de Lhasa para perjudicar la imagen de China a cinco meses de la celebración de los Juegos Olímpicos.
Tambier ayer, el ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Bernard Kouchner informó de que la Unión Europea (EU) aprobó un texto de condena a China por la detención de manifestantes en Tíbet, sin mencionar posibles consecuencias para la celebración de los Juegos Olímpicos de Pekín.