El desfile militar del próximo Día de la Victoria, 9 de mayo - el primero desde 1990 con la presencia de material bélico en la Plaza Roja de Moscú - va a enseñar la práctica totalidad de equipos terrestres que han sido incluidos desde entonces en dotación de las Fuerzas Armadas de Rusia. En muchos casos, la exportación de estas máquinas supera con creces las cantidades suministradas al Ejército nacional.
En el ensayo general del desfile participaron el lunes 8.000 efectivos y 200 equipos bélicos, incluidos aviones y helicópteros. Los militares lucían el nuevo uniforme creado por diseñadores famosos. "Por vez primera en muchos años tomarán parte en el desfile los equipos militares. No estamos blandiendo armas. No amenazamos a nadie ni pensamos hacerlo", manifestó ayer Vladímir Putin al reunirse con los miembros del Gabinete y los cargos directivos de la Administración Presidencial. "Es una demostración de nuestro creciente potencial en materia de defensa", resaltó el presidente saliente.
El Ejército ruso podrá enseñar en el desfile las armas y el material bélico de que se dotó en los últimos años, declaró el lunes Vladímir Bakin, jefe del Distrito Militar de Moscú. Con todo, el sistema de misiles intercontinentales sobre plataforma móvil Topol-M, modelo que está en dotación del Ejército ruso desde 2007, no será exhibido el 9 de mayo. Los militares se han limitado a traer para el desfile una versión antigua, del período soviético.
En cambio sí podrán atravesar la Plaza Roja, por vez primera, los misiles tácticos operacionales Iskander; los sistemas de misiles de defensa antiaérea S-300PMU-2 Favorit, Buk-M2 y Tor-M1; los carros de combate T-90A; los vehículos de desembarco BMD-4; los cañones autopropulsados Sprut; y los vehículos todo terreno Tigr.
En cuanto a la aviación, serán enseñados básicamente los modelos viejos: Tupolev-160, Tupolev-22M3, Iliushin-78, Sukhoi-24, Sukhoi-27, MiG-29 y MiG31. La única excepción será el flamante avión de combate Sukhoi-34 que aún se encuentra en la fase de pruebas oficiales.
El desfile de maquinaria bélica no significa de por sí que en Rusia se vayan reanimando ciertas costumbres militaristas, opina Ruslán Pújov, experto ruso en temas militares. Paradas similares se organizan en varios Estados miembros de la OTAN, por no hablar ya de diversos países del Tercer Mundo. Los eventos de este tipo hacen las veces de un balance presentado a los contribuyentes, al decir de Pújov.
Al mismo tiempo, el experto recuerda que en el caso de muchas armas rusas que se exhibirán durante el Desfile de la Victoria las cantidades exportadas han sido notablemente superiores a las que se han enviado al Ejército nacional. Así, los clientes extranjeros han recibido tres veces más carros de combate T-90 o vehículos de infantería BMP-3. En cuanto a los sistemas como S-300 PMU-2 Favorit o Buk-2, todavía brillan por su ausencia en las unidades de combate rusas, de acuerdo con una fuente de Defensa.
El desfile del 9 de mayo puede jugar un papel importante en la promoción de armas rusas al mercado internacional, opina Serguei Suvórov, quien trabajó en los Emiratos Árabes Unidos para Rosvooruzhenie (actualmente, Rosoboronexport), empresa pública que hace de intermediaria en la exportación del armamento desde Rusia. Así, el Ejército de EAU tomó la decisión de adquirir los vehículos BMP-3 precisamente después de que fueron enseñados en el último desfile militar soviético de 1990. Aquel pedido permitió preservar la producción de dicho modelo en la década del 90, recordó Suvórov.
