Bishkek, 23 de junio, RIA Novosti. Un avión nodriza de la Fuerza Aérea de EEUU que tiene su base en el aeropuerto internacional de "Manas" en Bishkek, Kirguizistán, se vio en una situación de emergencia y arrojó 31 toneladas de combustible sobre el territorio de esa república para evitar consecuencias más graves.
"El incidente se debió a una abrupta baja de la presión en el sistema del avión, que provocó mucho humo y un fuerte olor que penetraron en la cabina -comentó un portavoz del aeropuerto de "Manas"-. La tripulación consideró que la situación era muy seria y decidió arrojar el combustible para reducir el peso del avión y aterrizar con una mayor seguridad".
Los militares norteamericanos afirman que el combustible fue arrojado a 7.300 metros de altura y que se evaporó completamente sin llegar a la tierra. El incidente ocurrió el 21 de junio y las autoridades de Kirguizistán ya fueron informadas al respecto.
No es la primera vez que los aviones norteamericanos emplazados en Kirguizistán por mandato de la ONU -en el marco de la operación antiterrorista en Afganistán- arrojan combustible ante situaciones de emergencia. Así, uno de estos casos sucedió en 2005 en las cercanías de Bishkek.
