Moscú, 10 de noviembre, RIA Novosti. Un niño ruso de once años, Sergei Davitaya, realizó una serie de entrenamientos en estado de ingravidez creado durante vuelos parabólicos de un "Boeing", anunció hoy el portavoz del proyecto "Destacamento Internacional de Cosmonautas", Vitali Bárinov.
"Los padres de Sergei no consiguieron el permiso de la Agencia Espacial Rusa ("Roscosmos") para entrenar a su hijo en condiciones de ingravidez artificial en el Centro de entrenamiento de cosmonautas 'Yuri Gagarin' en la provincia de Moscú", comentó.
Explicó que las leyes rusas prohíben participar en tales experimentos a menores de 16 años.
"Así las cosas, los padres de Sergei se dirigieron a la corporación norteamericana Zero Gravity y ésta ofreció un 'Boeing' especial preparado para vuelos parabólicos, durante los cuales se realizan investigaciones científicas en condiciones de ingravidez", continuó Bárinov.
El vuelo se efectuó el 8 de noviembre pasado. El niño aguantó sin problema 15 maniobras de simulación de ingravidez, que llegaron a sumar siete minutos de estancia en la órbita terrestre. Durante el vuelo, los especialistas hicieron un cardiograma del corazón de Sergei y tomaron otros parámetros, y los resultados mostraron que el organismo del niño resistió perfectamente semejantes cargas.
El 11 de noviembre, Sergei Davitaya regresará a Moscú en un vuelo de la compañía norteamericana "Delta".
A los nueve años de edad, Sergei integró el "Destacamento Internacional de Cosmonautas" y participó en la primera conferencia interactiva entre la Estación Espacial Internacional (ISS) y el Centro de Control de Vuelos Espaciales.
"La velocidad de la luz limita nuestras posibilidades de viajar a mundos lejanos, pero nosotros, los niños del tercer milenio, nos vamos preparando para viajar a otras galaxias en las naves del futuro que tendrán una velocidad mayor a la de la luz", declaró en aquella ocasión Sergei Davitaya.
