Moscú, 14 de noviembre. RIA Novosti. El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, criticó a los dirigentes de Ucrania por aprovechar la hambruna feroz de 1932-1933 - o Golodomor que es como los ucranianos llaman aquella tragedia - para incitar discordia entre los pueblos.
Según algunas estimaciones, la hambruna causó entre 7 y 10 millones de víctimas en Ucrania. Kiev sostiene que la tragedia fue provocada por el régimen de Stalin y que era un genocidio deliberado contra los ucranianos, a pesar de que también hubo víctimas numerosas en otras zonas de la antigua URSS.
"Vemos claramente que este tema, junto con las gestiones persistentes por conseguir una invitación a la clase preparatoria de la OTAN, se ha transformado en uno de los elementos centrales de la política exterior de Ucrania en estos últimos años... Creemos que la tragedia ocurrida a principios de la década del 30 se usa en Ucrania para lograr objetivos políticos coyunturales", señaló el presidente ruso en un mensaje enviado a su homólogo ucraniano, Víctor Yúschenko.
Semejante postura, en opinión de Medvédev, contribuye a "la máxima separación de ambos pueblos unidos por seculares vínculos históricos, culturales y espirituales, por un especial sentimiento de amistad y confianza mutua".
Por tanto, el presidente ruso no estima posible participar en los eventos con que Ucrania conmemora el 75 aniversario de Golodomor.
El ulterior debate del tema de este tema en diversos organismos internacionales "no tendrá ningún provecho ni surtirá efecto alguno", opina Medvédev, convencido de que Moscú y Kiev deberían "elaborar planteamientos conjuntos" en relación con el problema e implicar en esta labor a expertos de Kazajstán, Bielorrusia y otros países de la CEI.
