Moscú, 2 de abril, RIA Novosti. Rusia suministró a China 15 grupos de sistemas antiaéreos S-300, informó hoy el director de la oficina de diseño del consorcio Almaz-Antei, Ígor Ashurbeili.
"Acabamos de cumplir un contrato muy importante, por el cual se suministraron a China 15 grupos de sistemas de defensa antiaérea (S-300)", dijo Ashurbeili a medios de prensa este viernes.
Según el funcionario, los importadores "hacen cola" para adquirir el armamento ruso (sistemas S-300 y S-400), pero el consorcio suspendió el proceso de negociación de nuevos contratos de suministro.
"Ante todo, hay que completar los arsenales del Ejército ruso", destacó Ashurbeili y agregó que de cumplir la empresa sus compromisos ante las Fuerzas Armadas nacionales, "ese proceso (negociación de contratos con compradores extranjeros) será reactivado".
El S-300 (SA-10 Grumble, según designación de la OTAN) es un sistema antiaéreo diseñado para proteger instalaciones militares y centros industriales y de mando de los ataques masivos desde el aire y el espacio. Es capaz de destruir todo tipo de aviones, cohetes balísticos y de crucero y teóricamente, puede atacar objetivos terrestres. Entró en servicio operacional en el Ejército de la URSS en 1979. La versión básica de S-300 incluye un radar multifuncional, rampa de lanzamiento móvil y medios de localización de objetivos y guiado.
Está provisto de misiles de combustible sólido de una etapa que alcanzan la velocidad máxima superior a 2.000 metros por segundo. Alcance: de 3 a 150 kilómetros; altitud de destrucción de blancos: de 20 metros a 30 kilómetros.
El sistema S-300 es capaz de efectuar el seguimiento simultáneo de 6 blancos y disparar contra ellos hasta 12 cohetes a la vez. Transportado en camiones, el sistema necesita 5 minutos para ponerse en posición de ataque.
Misiles antiaéreos S-300P. Infografía>>