Merkel visitó la India para vender cazas y reconstruir el mundo

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Tras la última visita de la cancillera alemana, Angela Merkel, a Nueva Delhi, Alemania puede adelantar a dos rivales principales, Rusia y EEUU, en el ámbito de suministro de cazas a la India.

Tras la última visita de la cancillera alemana, Angela Merkel, a Nueva Delhi,  Alemania puede adelantar a dos rivales principales, Rusia y EEUU, en el ámbito de suministro de cazas a la India.

Esta visita puso en evidencia el papel de Alemania en la configuración de un nuevo sistema de relaciones a nivel mundial.

Durante el viaje de Merkel a Nueva Delhi se produjo un escándalo, cuando el pasado 31 de mayo, Teherán impidió al avión oficial de la cancillera sobrevolar su espacio aéreo por lo que tuvo que dar varios círculos sobre el territorio de Turquía y aterrizó en Nueva Dehli, con un retrazo de dos horas.

Aunque tuvo lugar una situación sin precedentes, este incidente y varios otros acontecimientos relacionados con la visita de Merkel estuvieron vinculados con procesos a primera vista imperceptibles, pero muy importantes en el mundo.

La venta de cazas es el objetivo principal

En la agenda de la visita de la cancillera alemana a Nueva Delhi figuraron dos temas. Ante todo, es el desarrollo de la cooperación en materia de innovaciones. Los dos países firmaron acuerdos intergubernamentales en los ámbitos de educación, ciencia e investigación nuclear.

No hay nada sorprendente en esto. Hoy en día, todos los países suscriben acuerdos similares con la India, China, etc. Y sería inoportuno afirmar que Europa actua como donante de ideas para el tercer mundo. En caso de la India y varios otros países el intercambio es cada vez más equitativo.

El segundo objetivo de Merkel fue defender la apuesta del consorcio aeroespacial europeo EADS, con una importante cuota de Alemania, para vender 126 cazas Eurofighter a la India.

Rusia sufrió una importante derrota al quedar eliminada del concurso para el suministro de 126 cazas multifuncionales a la Fuerza Aérea de India, aunque la decisión definitiva no ha sido adoptada todavía.

A juzgar por todo, el consorcio EADS con el caza Eurofighter Typhoon y la francesa Dassault con el Rafale seguirán luchando por “el contrato del siglo” evaluado en más de 10 mil millones de dólares. Es una decisión política, o sea, un cambio elegante de la estrategia de desarrollo.

Es poco probable que Moscú pueda consolarse con el hecho de que los cazas estadounidenses F/A-18 y F-16 fueron eliminadas junto con el ruso MiG-35. El mundo ya dejó de ser bipolar y caracterizarse por la intensa rivalidad entre Estados Unidos y la Unión Soviética.

Hoy en día, está formándose a lo largo de líneas de fractura y ejes inesperados. Imaginémos cómo cambiará el estatus de Alemania en caso de que gane el concurso para suministrar la aviación militar para la futura segunda o tercera economía del mundo.

Además, Merkel y el primer ministro de la India, Manmohan Singh, abordaron el tema de Afganistán. El futuro de Afganistán donde la India, Irán, China y varios otros países desempeñarán un papel muy importante tras la retirada de las tropas de EEUU y la OTAN.

Recordemos también que las negociaciones entre los representantes de Washington y los talibán, enemigos jurados de EEUU, se llevaron a cabo en el territorio de Alemania y que este país se prepara para ser anfitrión de la conferencia sobre Afganistán a celebrarse a finales de 2011.

La primera conferencia sobre Afganistán tuvo lugar en 2001, cuando se estimaba dinero que necesitaría el Afganistán futuro tras la eliminación de todos los talibán. Pero ahora el mundo se tropieza con otras realidades y estimaciones.

El estilo de la política internacional aplicada por Merkel y Singh es similar. Es moderado sin el ímpetu ideológico. Pero los indios creen que más tarde o más temprano la India debería reforzar su presencia en varias partes del mundo.

Por ejemplo, en África podría competir con China en materia de influencia. Cuando los estilos del gobierno cambian se pondrán en evidencia los cambios en la política global.

Entretanto, estos cambios se vislumbran a través de tales acontecimientos poco significativos como el reciente viaje de Angela Merkel a Nueva Delhi.

Conflicto de valores entre Europa y Asia

El mencionado escándalo provocado por Irán está directamente vinculado con la India.

Existían fundamentos para la ofensa de Irán. El país ha firmado contratos de suministro de crudo a la India y dispone de bancos en el territorio de Alemania a través de los que se efectuaron las transacciones.

El gobierno de Merkel bloqueó las cuentas de Irán en virtud de las sanciones europeas impuestas  contra Irán a raíz de su programa nuclear. Tampoco se puede excluir que la decisión de bloquear las cuentas fue aprobada erróneamente.

Al fin y al cabo, la India recibió el crudo, pero Irán se encontró en una situación aún peor.

Se puede imaginar qué personajes están gobernando Irán hoy por hoy si se permiten a comportarse de este modo. Y no cabe duda que Nueva Delhi casi no ha manifestado su reación respecto lo ocurrido.

Las relaciones entre la India e Irán también son tensas, pero los indios en general intentan distanciarse de las sanciones europeas y estadounidenses y observar con un escepticismo cómo el Occidente se crea problemas en sus relaciones con nuevos líderes mundiales, a los que pertenecen tanto la propia India y China como potencialmente Irán también.

La India se pronunció en contra de los ataques aéreos de la OTAN en Libia, como Alemania, se recordó a Merkel en Nueva Delhi.

En general, se puede notar que cuando la UE aplica una política exterior colectiva respecto a Asia, esta política está basada en valores europeos. Y esto es una mala idea porque provoca un conflicto, confrontación.

En caso de la imposición de sanciones, cada año se hace más evidente que las potencias emergentes, la India, China, Brasil, Turquía y otros países no apoyan esta política.

Se trata del conflicto de valores y, en resultado, se entablan las discusiones sobre un debilitamiento de la influencia de Europa en la política global, etc.

Pero resulta que varios países europeos por separado que tienen intereses concretos bien pueden estrechar la cooperación con sus futuros socios. La visita de Angela Merkel a la India es un buen ejemplo de esto.

LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI





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