Todo 2013 Rusia se confrontó a EEUU por el problema sirio y el asilo que concedió al extécnico de la NSA Edward Snowden y a la UE por las pretensiones con la OMC, la ley contra la propaganda homosexual y la violación de los derechos humanos, entre otros muchos temas, resume el año el diario ruso Vedomosti.
A fin de cuentas, Rusia consiguió una solución del problema sirio que aceptaron todos, incluido EEUU, y que permitió comenzar el desarme. El acuerdo sobre la congelación temporal del programa nuclear iraní fue otra victoria de la diplomacia rusa.
Pese a esos avances, la confrontación resurgió en noviembre en torno a Ucrania. EEUU y la UE apoyaron las protestas proeuropeístas mientras que Moscú acordó un crédito al país vecino y redujo los precios del gas.
Aboliendo los aranceles sobre el gas, el petróleo y los diamantes Rusia consiguió también atraer a la Unión Aduanera a Armenia que hasta septiembre también aspiró a integrarse a la UE. Moscú reafirmó asimismo las relaciones estratégicas con Tayikistán –asignándole ayuda militar- y prometió un crédito a Bielorrusia.
Sin embargo, según el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, los acuerdos logrados todavía quedan por cumplir.
Mientras, el periódico ruso Kommersant subraya que el conflicto en torno a Snowden supuso un fuerte golpe para las relaciones entre EEUU y Rusia, ya en crisis.
Pese a todos sus esfuerzos, Washington no consiguió hacer que Moscú le devolviera al fugitivo. Snowden pidió asilo a 15 países pero solo Rusia decidió concedérselo lo que provocó la cancelación de la visita del presidente estadounidense, Barack Obama, a la capital rusa.
No obstante, ya antes de que surgiera el escándalo muchos dudaban de que el encuentro fuera exitoso. Los diplomáticos y los expertos reconocen que Rusia y EEUU tienen muy pocos puntos de común en la agenda internacional y económica.